lunes, 2 de abril de 2012

Los feriados son así

   Y los feriados son así, un poco aburridos, un poco cortos, un poco interminables, un poco vacíos, un poco relajantes...
   Y son esperados... Pero a veces nos damos cuenta que no lo planeamos lo suficiente y que, por ejemplo, se nos ocurren un montón de actividades para hacer, pero todas son imposibles, porque ¡está todo cerrado! Y vamos a un bar ¡y explota de gente! Y vamos al supermercado ¡y todos fueron también! Y pasamos tiempo con nuestra pareja ¡y nos arrepentimos!
   Y están todos haciendo lo mismo: en segunda merodeando por los barrios, caminando en grupos de 3, haciendo nada y sin muchas intenciones de hacer algo.
   El feriado es un día en el cual te permitís algunas cosas: no hacés y querés hacer, pero desistís, querés ir pero al final no vas, te querés juntar pero cancelás. No podés hacer transferencias bancarias inmediatas, no podés ir al dentista, no podés ir a la ferretería.
   Dado el panorama, propuesta para un feriado, y para la vida, y para el matrimonio, y para la paternidad y para la formación académica: ¡relájate y goza! Porque todo, casi todo es inevitable.