Salir de madrugada de tu casa tiene muchas cosas en contra.
Tenés menos tiempo que si te levantaras a las 7.30. No se por qué, pero hay que hacer todo más rápido.
Es de noche, no importa si es verano o invierno, siempre es de noche.
No hay colectivos, ni trenes, ni subtes ni premetros. Pasa un taxi cada 12 minutos.
Hay 1 persona cada 4 cuadras, y la mayoría de ellas no está en muy buen estado.
Y hay semáforos titilando en amarillo, como avisándote que está por llegar el día, con los mensajes de cupones de oferta, los diarios, la llamada de tu mamá, el reclamo de algún cliente y la presión de tu mujer.
A ponerse la vida... que empieza el día.