Son de colores fuertes (al principio) y resisten una fortuna de kilos.
Alargados y como de plástico con telgopor o como de goma eva con telgopor, o como de polietileno con telgopor.
Los veraniegos flota flota minan las piletas públicas y privadas. Los niños los usan como salvavidas entre las axilas, los adolescentes para golpear el agua como una espada ruidosa y los adultos... y acá va... los adultos no los usan. Acá me detengo porque creo haber descubierto un nuevo paradigma, acá hay tela para cortar.
A los flota flota los usan los ancianos, gente de malla enteriza (no porque quieran), para gente de chanclas y piel extra, para los que llevan el pelo por arriba de las orejas, independientemente del sexo. Son ellos los verdaderos usuarios.
Y por qué? El amigo flota flota permite la movilidad sin peligro de hundimiento y llama la atención (como cuando hay muchos nabos con snorkel en una excursión en Brasil), si le pasa algo, como por ejemplo atragantarse con la gorra de baño o tragar bronceador, ante un ademán con la mano rápidamente se identifica a la víctima gracias al llamativo color del flota flota. Misión cumplida.
Los ancianos han copado un mercado dedicado exclusivamente a los infantes, a los mal llamados "personitas" (si tuvieran algo de "personitas" no harían pis en la pileta).
Por lo mencionado, regálele un flota flota a su anciano más cercano, porque ellos lo van a usar con total alegría y usted va a poder tomar toda la cantidad de Fernet que quiera, fingiendo que los cuida.
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